Frico, la tortilla de patatas versión italiana: sin huevo, pero con mucho queso

"No necesitas muchas cosas para ser feliz". Así nos presenta Giulia, de @cookingwithgiulia en Instagram, una de sus recetas italianas favoritas: el frico. Una tortilla de patatas con queso increíblemente buena.

Y es que Giulia, italiana de nacimiento, pero residente en España, nos comparte, a través de sus redes sociales, muchas recetas originarias de su país natal. Hoy nos centramos en el frico, "felicidad sencilla al estilo italiano", según describe ella.

La divulgadora culinaria cuenta a sus seguidores que se trata de una receta tradicional de Friuli Venezia Giulia, una región del noroeste de Italia. El frico nació como un plato de aprovechamiento para reutilizar los restos del queso Montasio, típico de esa misma zona.

"Crujiente por fuera y suave por dentro, es ideal para esos días en los que solo quieres algo sencillo, reconfortante y hecho con amor", relata Giulia. Ahora que ya hemos aprendido un poco más sobre los orígenes de este increíble manjar, te contamos qué necesitas y los pasos que debes seguir para crear la mejor tortilla italiana de la historia.

¿Qué necesitas?

Para esta receta necesitarás únicamente estos ingredientes:

• 2 patatas.
• 1 cebolla pequeña. Este ingrediente es opcional, según si te gusta o no su sabor.
• 200 gramos de queso Montasio.
• Un chorrito de aceite y una pizca de sal.

El queso originario de esta receta es el Montasio, pero puedes sustituirlo por cualquier otro queso semicurado que se funda bien. Otra opción es hacer una mezcla de varios para que haya más intensidad de sabor. Según explica Giulia, es lo que se hace en Friuli, donde se suele mezclar un Montasio más joven con uno más curado.

Estas son algunas combinaciones que nos recomienda nuestra divulgadora:

• Queso Arzúa o de Tetilla con Queso Manchego
• Queso Emmental con Queso Parmigiano

Lo que sabemos seguro es que, escojas el queso que escojas, el frico quedará brutal.

Paso a paso

Sigue estas instrucciones para realizar el frico igual que Giulia:

1. Pica la cebolla y saltéala en una sartén con un poco de aceite.

2. Ralla la patata y añádela a la sartén con la cebolla.

3. Echa una pizca de sal para salar la patata y la cebolla.

4. Mientras se cocinan estos dos ingredientes, es el momento de cortar en cuadrados pequeños el queso que hayas elegido.

5. Una vez que la patata haya perdido toda su humedad, añade el queso.

6. Espera a que el queso se funda y asegúrate que se integre bien en la mezcla.

7. Cuando la tortilla esté tostada por un lado, debes darle la vuelta para que coja color por el otro lado.

8. Colócala en un plato cuando alcance el tostado deseado.

Ahora solo te queda disfrutar de esta exquisitez italiana tan fácil y rápida de hacer. Como bien dice Giulia: "A veces basta con una sartén, unas patatas y mucho queso".

Chuletas como nunca antes: el secreto de los cocineros polacos